Su fortaleza radica en ser un escritor novel después de triunfar en el cine. El cortometraje “Tono menor”, nacido de su relato “Extraescolares», lo empujó como productor ejecutivo a lomos de un caballo ganador con el que ya abraza 45 premios, una cosecha recolectada desde Iscar a Italia, Turquía o Bali. Entre todos, cabe destacar una nominación en Austin (Texas) que puso alas en su orgullo, al quedar seleccionado entre los cincuenta mejores de un total de cinco mil. “Espinas” ya es el nombre de una segunda producción. Con el ejercicio de la literatura se agarra a una delicada vía de escape de una actualidad que le preocupa e inquieta y, en apenas seis meses, ha escrito un primer libro en el que da rienda suelta a una sutil melancolía envuelta en relatos cortos que convierten en realidad su habilidad ante las letras. Detrás de éstas aparece un autor divertido, extrovertido, con ritmo, inmerso en el arte de contar historias.